Drácula ilustrado

Edición ilustrada por Daniel Jurado

Publicada en 1897 por el irlandés Bram Stoker, Drácula es una novela que nunca ha dejado de estar en circulación. Ediciones Brontes ofrece una edición acompañada por ilustraciones originales que complementan su lectura.

Bram Stoker, al igual que muchos escritores clásicos, tuvo una infancia problemática. Pasó los primeros 7 años de su vida en cama debido a diversas enfermedades teniendo que comenzar sus estudios en su casa, recurriendo a profesores particulares.

Fue el tercero de siete hermanos en una familia burguesa de Clontarf, una zona residencial de clase media al norte de Dublín. A sus 23 años se licenció en matemáticas y en ciencias. Ocho años después se mudó a Londres donde tuvo un hijo con su esposa Florence Balcombe, una antigua novia de su amigo Oscar Wilde.

En 1897, Stoker publicó Drácula, su obra más reconocida, basada en diversas leyendas que consigue unificar en una novela realmente inquietante. Si bien no tuvo un éxito inmediato, durante el siglo XX llegó a ser un best seller, incorporándose a los clásicos de la Universidad de Oxford en 1983 e inspirando una enorme cantidad de obras en el ambiente teatral y cinematográfico.

Drácula es una novela contada a través de cartas y entradas de diarios de distintos narradores, y acompañada por artículos periodísticos que le dan a la historia una carga de realismo y suspenso que no se pierde a lo largo de sus más de 300 páginas.

Las ilustraciones originales que acompañan esta novela en la edición publicada por Ediciones Brontes incrementan el clima de terror y suspenso propio de la novela, ya que ayudan a despejar de nuestra mente la imagen del Drácula maquillado o caricaturizado, que hemos visto cientos de veces protagonizando múltiples películas o dibujos animados.

La historia se centra en Jonathan Harker, un abogado londinense que viaja hasta el remoto castillo del conde Drácula, en Transilvania, para cerrar una transacción inmobiliaria. Harker se convierte huésped del castillo por un breve período de tiempo en el cual comienza a notar ciertos comportamientos inquietantes de la vida del conde: lleva una vida mayormente nocturna, no se refleja en los espejos, evita la luz del sol.
Harker, de a poco, irá tomando conciencia de su situación hasta darse cuenta de que, en realidad, no es un huésped del conde, sino, más bien, su prisionero.

Cuando vi claramente que yo era un prisionero de aquel castillo sentí por un momento que perdía la razón. Empecé a subir y bajar las escaleras como un loco, intentando abrir todas las puertas y asomándome por cuantas ventanas encontraba.

La historia continúa con los intentos de Harker de escaparse del castillo, lo que lo lleva a conocer a tres vampiresas (novias del conde), con las que Stoker agrega a la trama un componente de sensualidad y erotismo que lejos de descomprimir el terror creciente, lo acentúa.

No contaremos más sobre el desenlace de la historia pero sí aclararemos tres puntos a tener en cuenta para incentivar la lectura de esta excelente novela:

  1. Las constantes adaptaciones a la pantalla grande, (por la naturaleza propia del cine o por la impericia de algunos directores), dejaron en el imaginario colectivo una historia muchísimo más acotada de la que nos cuenta Stoker en su novela.
  2. Es imposible apreciar en la pantalla la riqueza de los personajes de esta novela (sin dudas uno de sus puntos fuertes).
  3. El terror que se alcanza al leer Drácula, no puede ser comparado con el terror que puede alcanzar el cine. No es ni más, ni menos; ni mejor, ni peor; es diferente. El terror del cine se apoya en sus impactos visuales y sonoros; el terror de una novela, tiene más que ver con el de un bosque obscuro: donde nos aterroriza la expectativa de lo que pueda ocurrir allí, donde no se ve ni se oye nada.  

Drácula, de Bram Stoker, en nuestra edición ilustrada, le aporta a la colección Fontana, una cuota de terror vampírico de la mano de uno de los clásicos de la literatura universal. Una novela que, al igual que los eternos vampiros, parece tener por destino el no morir nunca jamás.

Más información en: www.edicionesbrontes.com

Esteban Azzara